sábado, 13 de marzo de 2010

Despertar...

He despertado del letargo de la compadecencia,...
... con ganas de vivir intensamente cada instante,...
... porque el siguiente será diferente.

Vuelvo a disfrutar cada día de las mil sensaciones que éste aporta,...
... y el sencillo y mágico momento de ver amanecer vuelve a hacer sentirme afortunado de poderlo contemplar.
Vuelvo a recuperar las fuerzas de tornar al mundo y compartir con las personas que quiero y me importan el tiempo que me queda libre,...
... siempre con una sonrisa, impregnando TODOS los momentos de cariño.
Vuelvo a ser capaz de inventarme mil planes que me entusiasman y acojo con ilusión,...
... con ganas de involucrarme, de crear, de imaginar, de hacerlos realidad.

Cada día tengo más fuerza interior que el anterior.
Siento que mi corazón se me acelera al pensar en un mañana, en un futuro.
Me siento impaciente por seguir descubriendo la vida que aún me queda por vivir.

He vuelto a hacer mío el sentido de mi vida y a conseguir que una palabra,...
... un gesto,...
... una sensación,…
... me hagan sentir feliz.

Se quedan en el camino muchos sueños a medias en los que había puesto muchísima ilusión.
Sueños que por el momento no se cumplirán y puede que jamás se cumplan.

Sueños que llevaba años persiguiendo y dejé escapar por miedo,...
... y mis lágrimas no me dejaron ver como se alejaban hasta que los perdí definitivamente.

Pero todo eso ha quedado en el pasado y ahora, con las lecciones aprendidas, quiero disfrutar del presenta que yo he creado para mí.

Quiero comenzar a disfrutar de los nuevos sueños que empiezo a crear y no dejar que mi ilusiones se pierdan de nuevo por los caminos.

¡¡¡Quiero vivir y no perder ni un instante!!!


domingo, 7 de marzo de 2010

Reflexiones...

Hace tan sólo unos pocos días leía en http://memoriasdeunamargado.blogspot.com la frase que acompaña a la imagen que abre esta entrada.

Desde entonces, no ha dejado de darme vueltas por la cabeza, haciéndome reflexionar sobre cuán acertada o equivocada es la situación que en ella se detalla.

Incluso he ido un poco más lejos, pues he llegado a preguntarme…

¿ES, en realidad, MI CORAZÓN, teniendo a éste como una de las partes de mí capaz de amar y querer, UNO?

Al intentar responderme a esta pregunta, ha surgido otra...

¿He amado y querido a alguien con TODO mi corazón?

Tratando de encontrar respuestas a esta segunda pregunta, me vi en la necesidad de rebuscar en el cajón del olvido para indagar en todos aquellos “amores y quereres” que a lo largo del tiempo he sentido.

Me propuse también mirar con ojos analíticos y críticos todas y cada una de las costuras que tiene mi corazón por causas del amor y del querer.

Después de algún tiempo, y tras muchas reflexiones, supe cual era la respuesta…

¡¡¡No, no he amado y querido a nadie con todo mi corazón!!!

Encontré también la respuesta a mi primera pregunta: MI CORAZÓN nunca ha sido uno, sino que ES UN CONGLOMERADO DE FRAGMENTOS, cada uno de ellos capaz de amar y de querer a alguien de forma diferente, de manera única e irrepetible.

¡Me he dado cuenta de que alguna vez amé y quise hasta dolerme!

¡¡Me he dado cuenta de que cada vez que he amado y querido a alguien lo he hecho con algunos de los pedazos de los que está constituido mi corazón!!

¡¡¡Me he dado cuenta de que nunca he tenido que recomponer mi corazón por entero, sino que tan sólo ha sido necesario remendar el trozo que se había roto!!!

¡¡¡¡Me he dado cuenta de que aún tengo muchos trozos de mi corazón sin usar!!!!


sábado, 6 de marzo de 2010

Prohibido...

Desde hoy me prohíbo no ser yo mismo ante la gente,…
… fingir ante personas que me importan,…
… tenerle miedo a mis recuerdos,…
… y abandonar la lucha antes de hacer realidad todos mis sueños.

Me prohíbo no sonreírle a los problemas,…
… no entregarme en alma, corazón y sentidos,…
… pasar desapercibido,…
… no hacer las cosas por mí mismo,…
… pretender que otros se hagan cargo de mis deudas,…
… o dejar que todos paguen por mis errores.

Me prohíbo no demostrar el amor,…
… abandonar a mis amigos,…
… no intentar comprender lo que otros sienten,…
… y no ver que cada uno tiene su propia manera y su propio camino.

Me prohíbo llorar sin aprender,…
… o levantarme un día sin saber qué hacer,…
… pensar que, con la falta de alguien, el mundo se termina,…
… o desesperarme por tener que seguir solo alguna vez.


Me prohíbo dejar de dar gracias a la vida por la vida,…
… lamentar lo que no he hecho sin hacerlo,…
… quejarme de lo hecho sin cambiarlo,…
… ignorando que “así como está” no es la única manera.

Tengo por supuesto absolutamente prohibido,…
… sin postergaciones ni argumentos falsos,…
… dejar de ser el principal protagonista de la película que va narrando poco a poco mi vida.

Finalmente, y sobre todo, tengo estrictamente y terminantemente prohibido,…
… desde ahora, sin excusas y para siempre,…
… que alguien se permita prohibirme lo que a mí mismo no me prohíbo de forma permanente.


viernes, 5 de marzo de 2010

45 x 365...

45 x 365 = 16.425…
… días vividos,…
… 1.773.900.000... ¡latidos!


En todo este tiempo,…
… ¿cuántos…
… “te quiero” y “te estoy amando” he, realmente, sentido?
… caminos llevo recorridos?
… sueños he perseguido y, al final, conseguido?
… abrazos y besos he compartido?
… “perdón” tuve que pedir?

… ¿cuántas…
… sonrisas llevo esbozadas?
… lágrimas tengo derramadas?
… caricias he dado?
… cicatrices me he contabilizado?
… decisiones he tomado?
… “encrucijadas” tengo solventadas?


¿Cómo hacer para tener otros tantos...
... días por contar,...
... latidos por vivir?

Posiblemente tenga que recurrir a todos…
… los “te quiero” y “te estoy amando” que me quedan por sentir,…
… los caminos que aún he de recorrer,…
… los sueños que he de continuar persiguiendo,…
… los abrazos y los besos que me quedan por compartir,…
… los “perdón” que me restan por pedir.

Y a todas…
… las sonrisas que día a día tendré que esbozar,…
… las lágrimas que me quedan por derramar,…
… las caricias que me restan por dar,…
… las cicatrices por contabilizar,…
… las decisiones que aun he de tomar,…
… las encrucijadas que tengo que solventar.